sábado, agosto 22, 2009

Del autor

¿Cuál es el pretexto perfecto para escribir? ¿Para qué empeñarse en tal labor? ¿Acaso es una real necesidad o sólo es otra de mis necedades? Creo que por algo se me han negado últimamente las ideas, justo cuando tengo a la mano el tiempo, el café, el teclado, el cigarro y la disposición de hacerlo. Algunas líneas... simplemente algunas. No pasa nada interesante por mi cabeza ni nada tan morboso para contar de lo que me pueda arrepentir. Lástima, hubiera sido una buena historia con tanto tiempo disponible... será para otra ocasión.

No hay comentarios: